viernes, octubre 20, 2006

04:58

Anoche me vi desvistiéndome de mí misma. Mi mano sobre mi nuca para alcanzar el cierre que recorría mi espina dorsal, y lo abrí, y salí de ahí, caminando, mientras mi cuerpo quedó tirado como un traje abandonado. Sin cuerpo, pero caminé, porque no eran mis piernas ni un cerebro quienes me dirigían, sino mis deseos y pensamientos. Solo estos. Y todo el tiempo tuve la sensación de saber exactamente a dónde iba, la más clara certeza de qué es lo que quería. Y con eso, me sentí flotar de la más pura emoción y alegría. Desde allá arriba, pude ver a otros, vestidos, mirándome, y señalándome acusadores: ¡hey, ve a vestirte!; y a mí no me importó. Y tuve la sensación de estar riendo y seguí adelante. Desperté remecida, y decepcionada de seguir en este pequeño traje, cuando a veces siento que lo que traigo dentro es un gigante. El sueño me ha dejado en claro sí, que el gigante ha hablado y ha decidido ciertos caminos a determinados lugares que lo esperan. Ha delineado un plan y una estrategia. Y estamos de acuerdo: Life is short.

2 Comments:

Blogger Rain (Virginia M.T.) said...

Un gigante

lo imagino,

amable
amable amable

12:42 a. m.  
Blogger George said...

Supongo que caminar desvestido del cuerpo relajante, imagino que no tienes pero y que atraviesas los objetos.

8:34 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home